Disuelve la levadura en la leche tibia. Agrega 140 g de azúcar, 120 g de mantequilla blanda, harina, huevos y sal y amasa todo hasta formar una masa de levadura. Deja reposar la masa en un lugar cálido durante 60 minutos, hasta que doble su tamaño.
Luego, extiende la masa hasta formar un rectángulo de unos 30 x 60 cm.
Mezcla las frambuesas con 80 g de azúcar y almidón de maíz y distribuye la mezcla de frambuesas uniformemente sobre la masa extendida. Luego, enrolla la masa y córtala en 16 rebanadas iguales. Coloca las rebanadas de masa en un molde rectangular preparado o en una bandeja pequeña y profunda y déjalas reposar nuevamente en un lugar cálido durante 60 minutos.
Precalienta el horno a 180 °C con calor arriba/abajo. Coloca el molde en el horno y hornea los caracoles de frambuesa durante unos 25 minutos, hasta que estén dorados. Mientras tanto, puedes preparar el glaseado derritiendo 40 g de mantequilla y mezclándola con el azúcar glas y la crema de leche.
Distribuye el glaseado terminado sobre los caracoles aún calientes para que se absorba bien en el pastel. ¡Los caracoles de frambuesa saben mejor cuando se disfrutan calientes!