Quita el tallo de la col de Milán y retira las hojas exteriores. Hierve las hojas exteriores durante unos 2 o 3 minutos en agua salada y luego enfríalas en agua helada. Limpia las hojas con un paño. Forra el tazón con film transparente y coloca una capa de hojas de col dentro.
Corta el interior de la col de Milán, la zanahoria, los pimientos, la cebolla y el ajo en trozos pequeños y fríelos en una sartén con aceite. Sazona esta mezcla con semillas de hinojo, sal y pimienta. Vierte todo en un recipiente y deja que se enfríe un poco. Añade la carne molida, los huevos, el queso, el perejil, la sal y la pimienta al tazón, y mézclalo todo.
Rellena alrededor de 1/3 del tazón forrado de col con la mezcla recién preparada. Alterna en el tazón las capas de col de Milán y la mezcla de carne molida. La última capa debería ser la col de Milán. Empaca todo en forma de una bola usando film transparente. Métela al refrigerador durante 2 horas.
Retira el film plástico y ata la pieza con cuerda de cocina. Coloca la col rellena en una olla y añade 2 litros de caldo caliente. Ponle la tapa a la olla y métela en el horno a 170 °C durante 60 minutos con la circulación de aire activada.
Retira la cuerda antes de servir la col rellena. Una gran receta para todos los que les gusta el repollo de Milán o que quieren probar nuevos sabores.