Mezcla el azúcar, la leche y el agua tibia. Añade la levadura fresca y deja reposar por 10 minutos.
En un bol grande, mezcla la harina de trigo, el huevo, la mantequilla blanda, la sal y la tinta de calamar. Añade la mezcla de levadura y amasa hasta obtener una masa homogénea.
Deja reposar la masa en un lugar cálido durante 1 hora o hasta que doble su tamaño.
Forma bolitas con la masa y colócalas en una bandeja para hornear. Pinta con la yema de huevo mezclada con la leche y espolvorea con semillas de sésamo negras.
Hornea a 180°C durante 15-20 minutos o hasta que estén doradas.